Mujer desnuda
Una geografía accidentada de cuyo recorrido seguramente peligroso no amainaría el deseo de descubrirla.
Mirar siempre con ansiedad el otro lado de cada monte porque puedo volver a bordearlos al no haber conquista en esos territorios independientes.
Explorar sus valles y sorprenderme con la fertilidad de su piel que no cesa de sentir por esencia.
Asumir la vertiginosa experiencia de moverse sobre el rostro sin posibilidad alguna de correr el riesgo de estropear la perfección.
Mirar hacia el horizonte y descubrir el norte en su corazón.
escrito por Juan Pablo Belair @ 12:07 a. m.
9 Comments:
puta! qué lindo!! (sin filtro)
Un orbe de piel para explorar, medio peligroso, medio exótico, pero siempre seductor.
Quien podría negarse a convertirse en aventurero, aunque ya jubilado de aventuras sólo quisieramos quedarnos con nuestros libros.
Que manera de escribir amigo, que manera.
Un abrazo.
es cierto que??
Estimado amigo,
En serio, es posible que todo acabe, lamentablemente lo imposible es aceptarlo.
Trae aventuras de tu proximo viaje para que las cuentes...
Un abrazo.
sea como sea, recorrer esas rutas a veces sin señales es el viaje más apasionante, cuando llega el cansancio, poder dormir acurrucado en ese mismo camino, protegido en ese valle, bajo las montañas, y dejarse mojar por las lluvias que cayeran, es sin dudas el sueño de cualquier caminante de la vida
y si descubrimos el corazón en el horizonte, creo que el sueño ya está cumplido...
siempre hermosas tus palabras, gracias
un abrazo
Como siempre me quedo con algo de tus letras...
"Mirar hacia el horizonte y descubrir el norte en su corazón."
Creo que todos buscamos eso...
te dejo un abrazo de espejo
@
Recorrer nuevos paisajes, descubrir rutas y cerros... El senderismo exalta el ánimo y sosega el alma.
JPablo, bellas tu letras en tu blog y en el mío.
No hay más verdad que el cuerpo amado.
No hay extremo más seductor que tus letras.
Brindemos por los sonidos de la piel amada.
Besos compañero del alma.
te dejo una abrazo
@
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